A favor diputado de Morena en posesión de armas
Redacción
Ciudad Victoria, Tamaulipas. – El diputado local de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Marco Antonio Gallegos Galván, consideró que se deben facilitar los trámites para permitir la posesión de armas de fuego para defensa propia en Tamaulipas.
De acuerdo con la Ley Federales de Armas de Fuego y Explosivos la posesión de armas de fuego en los domicilios deberá informarse a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) con un domicilio permanente.
A título personal, el diputado presidente de la Comisión de Seguridad Pública, Prevención y Reinserción Social consideró que la Sedena debe agilizar y flexibilizar el trámite para las personas que deseen contar con un arma en sus domicilios o negocios: “Creo que la portación sería peligrosa, pero sí estoy convencido que debería haber más facilidades para la posesión”
“Que tuvieran la oportunidad que algunos negocios que acrediten de manera correcta su modo de vivir, pues pudieran tener acceso a poseer un arma dentro de sus negocios o dentro de su domicilio, ya hay legislación, pero a veces son trámites muy complicados, muy rebuscados, entonces yo iría por la agilización de esa parte”, dijo.
Es preciso aclarar que la posesión y la portación no es lo mismo, ya que la primera se da cuando una persona tiene o lleva un arma de fuego consigo en el interior de su domicilio o negocio; mientras que la portación se da cuando una persona lleva consigo un arma fuera de su domicilio o negocio, portándola en todo momento.
Aclaró que le apuesta a la posesión de armas y no a la portación, ya que no se puede combatir fuego con más fuego cuando lo que se busca es la paz en el país y en el estado.
“A final de cuentas en un país donde se viven temas de estrés, tener acceso con tanta facilidad de traer un arma yo creo que no sería lo sano, no estamos preparados como sociedad y también hay que ser muy cuidadosos en esa parte”, dijo.
Aseguró respaldar la política del presidente Andrés Manuel López Obrador de “abrazos y no balazos” al quedar demostrado que una “competencia de fuego” no resulta bueno para la percepción de la seguridad, ni de la propia sociedad, al incrementar las víctimas colaterales.