Canasta básica en Tamaulipas, alcanza uno se sus picos más altos; alcanza para menos
Ciudad Victoria, Tamaulipas. – Tamaulipas inició el año con el pie izquierdo. En el último mes se ubicó como el estado con uno de los mayores incrementos en los precios de la canasta básica, de acuerdo con un informe de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).
La medición que realiza la organización establece que durante el cierre de enero se registró un incremento del 8.29% en los productos que conforman la canasta básica en Tamaulipas, mientras que a nivel nacional el incremento apenas alcanzó el 1.08%.
Tamaulipas se ubicó por debajo de Nuevo León que registró un aumento del 10.30 por ciento; le siguen Campeche con 6.27%, Zacatecas con 6.18 y Baja California Sur con 5.66%. Todos esos estados tienen algo en común: sequía y violencia.
El presidente de la Anpec, Cuauhtémoc Rivera, dijo que la sequía y la inseguridad son los principales factores que la canasta básica se haya incrementado en Tamaulipas; la primera al ser un cambio climático que merme la producción agrícola; la segunda, entorpece y encarece toda la cadena de producción y suministros, desde la siembra, hasta la venta en la calle por la presencia de pandillas que resulta agresivas para el pequeño comercio.
Cuesta de enero encarece frutas, verduras, granos y proteínas, según la Anpec. En el caso de Tamaulipas el precio del kilo de la piña ha incrementado hasta alcanzar los 75 pesos, uno de los precios más altos que se tiene registro. Cuando en diciembre del 2023 el kilogramo se ubicaba en los 35 pesos con 50 centavos.
En los últimos tres reportes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) se registra una tendencia al alza del fenómeno inflacionario a nivel nacional, alcanzando el 5% la inflación general y colocándose por encima del 10% lo que respecta a alimentos.
En el caso de Tamaulipas este efecto ha impactado más en los productos de la canasta básica como carnes, pollos y pescados, frutas como la pera, tomate, manzana, limón; y verduras como la cebolla, la papa; incluso en la leche, huevo y las legumbres.
El incremento de los precios de la canasta básica afecta principalmente a las familias vulnerables que tienen menores ingresos salariales, que son los que destinan la mayor parte de sus sueldos en la compra de alimentos.
“Es un impuesto tan nocivo que afecta el estado de ánimo de la población, su capacidad productiva, su emocionalidad para llevar una sana convivencia social y, por supuesto, su salud, porque una alimentación deficiente no nutre, al no consumir proteínas suficientes las personas se ven obligadas a saciar su hambre de cualquier manera, con lo que encuentren, quedando en condiciones de debilidad e indefensión ante la ola de enfermedades respiratorias presentes en la temporada invernal, aunado al rebrote de COVID e influenza”, señaló Rivera.
