El Arriero
Todos los que apostamos sabemos que se gana y se pierde, en tiempos de triunfo nos da felicidad y alegría compartiéndolo con los amigos, saliendo de los poros de la piel nuestro contento, mientras que la derrota nos llena de tristeza, de dolor y coraje y le endilgamos la culpa a todo mundo.
En Tula la mayoría del equipo de campaña de René Lara Cisneros son probos y pocos, pero si hay impresentables y todos preparan el arribo al poder este venidero primero de octubre en que rendirá su protesta como alcalde el químico René Lara Cisneros, algunos pensando en el disfrute personal que son los menos y, los más con la firme idea y propósito de servir a la colectividad.
En el caso de Antonio Leija Villarreal quien perdió la elección del 2 de junio del 2024 debe de saber que no hay derrotas definitivas que estas sirven y aleccionan como las cornadas a los toreros, si el matador sobrevive tendrá una gran experiencia.
———– En estos momentos en Tula René Lara Cisneros se ha convertido en el Santa Claus de los Tultecos, la gente le pide que les envié pipas con agua a sus domicilios, que les proporcione materiales para la construcción y hasta lo asedian para que René se convierta en el compadre número uno de Tula.
Pidiéndole un gran número de gente que sea el padrino de bautizo de sus hijos, de confirmaciones y que también sea el padrino de música en los nuevos matrimonios.
Pero esos pedicheros únicamente lo que quieren es sacar provecho económico del compadrazgo que de buena fe les otorga el alcalde electo de Tula René Lara Cisneros, ya que la mayoría de los Tultecos están acostumbrados estirar la mano y pedir y pedir, sin merecerlo.