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CALLES EMPEDRADAS PARA CONDUCIR EL AGUA A LOS ALJIBES DE FELIPE ANGELES ¿SERÁ BUENA IDEA?

 CALLES EMPEDRADAS PARA CONDUCIR EL AGUA A LOS ALJIBES DE FELIPE ANGELES ¿SERÁ BUENA IDEA?

Redacción.-

Muy avanzados se aprecian los trabajos de las dos calles que servirán de contención del agua lluvia en el ejido Felipe Ángeles para conducir el torrente hacia los dos aljibes, mismos que cuando tienen agua se aprovecha para conducirla a las piletas donde abreva el ganado, además para irrigar las plantas que hay en el vivero, que es de donde los Sembradores de Vida las acopian para luego replantarlas en el terreno ( dos y media hectáreas) que tiene acreditado ante la secretaria del Bienestar.
Sin lugar a dudas la idea de los Sembradores de Vida es genial, toda vez que cuando llueve el agua que se precipita de la región serrana se pierde en la campiña y la mayoría de las veces no se aprovecha, no así, con la captación de agua en los depósitos donde el excedente se irá al campo donde podrían conducirla hacia los terrenos cultivables.
Todo ese concierto de ideas suena muy atractivo y, de hecho, así será en gran medida—el agua bajará de la parte alta del ejido con una velocidad aproximada de 4 metros por segundo, lo que es un desplazamiento con gran celeridad y para contener ese torrente se programa colocar topes – rampas, que tendrán doble función, una dar paso a los vehículos y que prosigan su circulación y otra para contener el agua bronca y conducirla por las calles que ya se están empedrando con rumbo a los depósitos de agua.
Hasta ahí todo parece miel sobre hojuelas, peroooooo, no hay que pasar por alto que el agua busca la filtración y las piedras que están colocando en las calles no tienen nada que las mantenga en el lugar donde las colocan los “maestros empedradores” por lo que estas sin lugar a dudas serán arrastradas hacia los aljibes y podrían obstruir el paso de vehículos que cruzan por la carretera Capulín – Bustamante a la altura de los aljibes..
No hay que pasar por alto que la erosión y la velocidad del agua de lluvia tiene una relación directa, y es que a medida que aumenta la velocidad del agua también aumenta la erosión y es que es verdad de Perogrullo que el agua rápida arrastra piedras y pues podría desbaratar el trabajo de empedramiento.
Para mejor proveer,— el callejón que es acceso a la escuela primaria —- de dicha institución educativa aproximadamente 2 cuadras hacia arriba, se sitúa de forma adyacente la calle que se destina para conducir el agua lluvia hacia los aljibes para que el recurso se contenga se construirá un gran tope-rampa y, en esa contención topará el líquido vital y esta seguirá por la calle empedrada como se ha programado,– pero es ahí donde el agua hará un cambio de dirección es decir realizará un giro de 90 grados cambiando de ruta hacia los depósitos y lo hará con gran ímpetus que seguramente dañará la calle arrastrando las piedras y dejando una gran erosión.
Es por ello que algunos expertos han referido sobre las calles empedradas en mención que estas se debieron construir a base de concreto hidráulico, porque con una lluvia intensa como la próxima pasada que se denominó huracán Alberto, la rúa podría quedar pletórica de enormes baches y tal vez poco funcional.

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