Dios dice: Ayúdate que yo te ayudaré
Palmillas.- No ha mucho de hoy llovió a cántaros en Palmillas y, el agua se convirtió simplemente en <escorrentía>, es decir, circuló libremente aprovechando la gravedad sobre la superficie de la tierra y al día siguiente solo quedaron los recuerdos y alguno que otro charquito que sirvió para que los pájaros bebieran agua y lo mismo hicieron las lagartijas.
Es significativo destacar que cada día habrá menos agua disponible, según lo dicen los científicos, por lo que debemos entender que debemos aprender a almacenar el líquido vital que necesitamos en nuestro hogar.
Pronto llegará el día que los pedicheros por más que estiren la mano para recibir alguna dación, sinceramente recibirán mucho menos, de sus necesidades, o quizá nada llegara sus manos, y todo, porque el sistema que invoca el ejecutivo federal que podría rayar en una dictadura, pues en poco tiempo mas no necesitará los votos de los electores, porque ellos, manejarán el sistema electoral, luego entonces, a los pedigüeños les DARÁN lo que las amas de casa le ponen al molcajete para que la salsa pique.
Por esta razón es menester adelantarse a los tiempos y virtud a ello busquemos medios de subsistencia alternativos y, por tal no depender de las dádivas del gobierno.
Para empezar, la gente en este caso la palmillense, debería construir en sus traspatios un aljibe tan grande como su solar lo permita, aprovechando los programas que aún les obsequian a decir; block, cemento, arena, grava etc.
Y en sus ratos libres hacer un hoyanco lo más grade y profundo que puedan luego ademarlo con los materiales descritos y cuando esté listo el aljibe, se cubre la boca del depósito con los materiales que dispongan, pudiese ser los mismos con los que se construyó el deposito, después con tubería y algunas canaletas colocadas en la techumbre de la casa con rumbo al aljibe y, se podría recolectar agua dependiendo de los metros cuadrados del techo.
Según los expertos por cada mm de altura se corresponde un litro de agua por metro cuadrado, dependiendo de las dimensiones del techo.
Para ilustrar este cometario sucinto, podemos señalar que en el Municipio de Saltillo Coahuila, ha sido un éxito, toda vez que algunas familias de la comunidad a comento almacenan agua de lluvia en grandes cantidades.
Ha trascendido que la Familia Núñez, de aquella población ha logrado almacenar más de 100 mil litros de agua, lo que equivale a 10 pipas llenas de agua, y el líquido vital lo utilizan para beber, para regar un gran huerto de hortalizas y, cuando se escasea el agua de la red, también se utiliza para los quehaceres del hogar además para darse una ducha y para los escusados.
La familia descrita todo el año tiene verduras frescas en su hogar, ya que según trasciende que no se acaban el agua almacenada y cuando vuelve a llover se rellena el depósito.
Este ejemplo lo deben copiar en Palmillas porque cada día que pasa hay menos agua en el subsuelo y si ese recurso hídrico se abate los palmillenses pasarán las de Caín y hasta podría haber broncas porque los más holgazanes intentarán robar el agua a los ciudadanos previsores.
Solamente compraría agua para beber, aunque el agua lluvia se puede hervir y consumirse, es dable decir que esos depósitos anidan mosquitos y algunas otras larvas, pero la lumbre mata todo.
Que no nos alcance el tiempo, ya en Japón SE HA INVENTADO UN DISPENSADOR DE AGUA QUE SE FABRICA DE LA NADA aprovechando la fórmula H2O de dicho líquido, la cual descompone y partir de ese trabajo químico producen agua de la nada para beber, pero esos dispensadores cuando ya abarroten los mercados costará mucho dinero. Dicen que se podría producir hasta 90 litros por cada 24 horas, pero ahí están los bemoles ¿cuánto fluido eléctrico requerirá para que produzca el agua que requerimos en nuestro hogar?
Palmillas cada día tiene menos agua a pesar de que en el poblado el Naranjo nace el rio Guayalejo, regato que en Jaumave lleva un significativo caudal y multiplicado por 100 mil ese volumen de agua pasa por el municipio de Llera.
Así que, — ciudadanos palmillenses póngase las pilas, porque el agua que se precipita en la campiña, además, la que escurre de sus tejados o techos de concreto se pierde, se va en fluida escorrentía, sin sacarle provecho alguno.
–Sin duda es necesario que se almacene el líquido vital por diversas razones, amén de las que ya se mencionaron en el cuerpo de esta columneja …
Podemos advertir que …” La recolección de agua de lluvia ayuda a controlar la escorrentía de la misma, lo que reduce el riesgo de erosión en jardines y alrededor de bajantes, minimiza el impacto en la infraestructura local de aguas pluviales evita que el sistema de alcantarillado colapse. Por lo que ayuda a reducir la amenaza de inundaciones…” sic. sin lugar dudas podemos concluir con la frase que dice Dios ayúdate que yo te ayudare.
