El Mazo del Decidor

Cd. Victoria/Redacción.- El alcalde de Victoria, Eduardo Gattás Báez, ayer hizo una revelación a los medios de comunicación.

Dijo que desde hace unas tres semanas ha estado siendo molestado por personas que desconoce y de lo que advierte peligro para su persona, su familia y sus hermanos.

Son declaraciones fuertes que a cualquiera pueden preocupar con toda razón.

No precisó mayores detalles de esas intimidaciones que ha recibido, ni dijo de quién sospecha, para nada, su declaración fue muy cautelosa (como debe ser), porque es mejor dejar en manos de las autoridades competentes el esclarecimiento de esos hechos.

Adelantó que acudirá ante el Secretario de Gobernación para ponerle al tanto de lo que ocurre. Es lo más correcto.

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Y ahora resulta que Rodolfo González Valderrama deja el cargo de delegado federal de los programas de la 4T.

Las razones no se conocen, la noticia corrió como reguero de pólvora, pues Rodolfo aspiró a ser candidato de Morena por la gubernatura de Tamaulipas y, de pronto, adiós del estado.

Las verdades suelen flotar y las causas reales de su “renuncia” pronto se sabrán, ni quien lo dude.

Por cierto, se dice que Luis Lauro Reyes Rodríguez, ex alcalde de Güémez será el relevo de Rodolfo.

Tras su gris trabajo como alcalde, no se avizora nada bueno como delegado federal. 

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Las más recientes camadas de legisladores, ya sean locales o federales, han salido muy sensibles, todo les duele, todo les afecta, todo les trauma.

Pocos, muy pocos son capaces de sostener un debate de ideas claro, objetivo, con sustancia, porque la mayoría recurre a los gritos, insultos y a todo tipo de agresión por la incompetencia profesional y la ausencia de tamaños de políticos.

En el Congreso del Estado de México, ayer dos diputados se ofendieron y casi llegan a los golpes. El más enfurecido fue el de Morena. Uff.

Y en tanto, en la Cámara de Diputados, la federal, como usted sabe, se dieron un agarrón los panistas con los morenistas.

Los panistas pidiendo que AMLO deje de molestar a los comunicadores y el asunto del hijo millonario que nunca ha trabajado.

Eso ofendió a los divos de Morena que prefirieron abandonar el recinto. No tienen nivel, no tienen tamaño, está más que claro. Qué porquería.