El Mazo del Decidor

Algo a profundidad deberemos hacer los ciudadanos en torno de quienes han sido electos para ejercer algún cargo, el que sea de elección popular.

Y digo que algo, pues casi por regla general, los electos no hacen el esfuerzo de cumplir adecuadamente su encomienda pública y solo aprovechan e cargo para su beneficio y para fastidiar a sus adversarios.

Pero en tanto, la población civil, los de a pie, padecemos las frustraciones, complejos y animadversiones que padecen los “gobernantes”.

Todo eso redunda en los presupuestos establecidos para el ejercicio de sus encomiendas, pero les vale gorro, sus filias y sus fobias los rebasan rotundamente y les provocan tremendas cegueras.

Poe eso estimamos que ya, debemos impulsar medidas definidas, ordenadas, dentro de la ley, para decirles un “ya basta” a la enorme partida de mediocres, ignorantes y pusilánimes que acceden a un cargo gubernamental.

¡!!Ya basta!!!. Y si no les gusta, cómprense unas zapatillas de ballet y váyanse de puntitas……allá.

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En la sesión de ayer de la Diputación Permanente, en el apartado de correspondencia, se dio cuenta con la solicitud de licencia de la diputada panista Sandra Luz García Guajardo.

Sin decir “agua va”, sin aparente motivo lógico, necesario, estratégico, la diputada “lanzó la toalla”.

No se le va a extrañar tanto, déjeme decirle, sus aportaciones a la actual legislatura son nulas, pasó de noche, no mostró capacidad ni talento, solo ocupada su curul.

Ella fue suplente en el Senado de la República del actual Gobernador, pero nada más. Aunque se le impulsó a un cargo en la nómina estatal, Sandrita, nunca pudo justificar su designación. Se va sin pena ni gloria. Adiós.

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Mal se ve, como siempre, el diputado Fernando Félix García Aguiar quien, hasta el momento, preside la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado.

Y es que, a sabiendas de que pronto iniciará la gestión de una nueva administración gubernamental, procede a poner trabas legislativas a cualquier eventual reforma que provenga del gobernador electo Américo Villarreal.

Atizó diciendo que no ve la manera de que se convoque a una sesión extraordinaria para analizar una eventual reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública, como siempre se estila, por cortesía, por madurez política o por simple gallardía.

Eso último no sabe qué significa García Aguiar, él simplemente es un patán con cuerpo de marioneta.