En los últimos días ha surgido una fiebre de “candidatitis” en Bustamante.
Suspirantes, — por montones se acercan a las instalaciones estatales de Morena para entregar la documentación que exige el partido para que tengan la oportunidad de participar en busca de la alcaldía de Bustamante.
Son los mismos ambiciosos y obsesivos, quienes cada año pretenden que el partido los tome en cuenta para entrar a la refriega electoral el próximo año 2024.
Son pocos los que en el año 2021 no solicitaron registro para incursionar en la contienda electoral avalados por el partido que se describe, de esos pocos que no se inscribieron en busca de la candidatura a la alcaldía, que está en manos de los azules y, que ahora ya se les calentó la hormona y sienten posibilidades de arrancarle un gajo a la historia de Real de los Ynfantes,– estos son: Gildardo Chairez Pecina, Román Reyes (a) Bronco, Ramiro Nava Jr. y otros, aunque hay que decirlo recio y quedito que si está difícil que le coman el mandado a los albiazules, porque los que se dicen Morenos no son de corazón. Más bien oportunistas que semejan a los cometas, mismos que, aparecen en pocas ocasiones en el firmamento, — inclusive hay personas que en su vida nunca ven un fenómeno de tal naturaleza, o séase que los morenos, casi en su mayoría son unos cometas.
Los Guindos solo cuando el nopal da tunas se acercan a usufructuarlas, mientras los que jalan con el Acción Nacional, todos los días se reúnen para armar estrategias, esa es la gran difería entre las personas que tiene convicciones y los aventureros de la política.
En los tres años que dura el mandato municipal, los Morenos se regresan a sus trincheras, unos se van a la Sultana del Norte, otros a Nuevo Laredo, otros más a refugiarse a los pueblos de Nuevo León que son colindantes con Bustamante—estas personalidades más semejan a <los carteristas que se concentran solamente cada que destapan a un candidato al gobierno del estado>, para –entre la muchedumbre despojar a los ricos de sus carteras.
Quizá el ejemplo sea agresivo, pero parecería que así trabajan los colores vino tinto, que desean la candidatura de Bustamante, los cuales en todo el trienio están perdidos, ¡ah! perooooooo, cuando se acercan los tiempos electorales, brotan por doquier como los hongos después de la lluvia.