Jaumave, el consentido del altiplano
Jaumave se ha convertido, sin duda, en el municipio estrella del altiplano tamaulipeco. Bajo el liderazgo del alcalde Manuel Báez Martínez, la sinergia con el gobierno estatal encabezado por Américo Villarreal Anaya ha rendido frutos tangibles, visibles y, sobre todo, sentidos por la población.
Desde la campaña, Manuel Báez Martínez y su esposa, Yesenia Huerta Abundis, lograron formalizar compromisos claros: gestionar y atraer beneficios reales para los habitantes de Jaumave. Y vaya que lo han cumplido. La última visita del gobernador Villarreal y su esposa, María de la Luz Santiago de Villarreal, al ejido Las Antonias no solo fue protocolaria, sino altamente productiva. Ahí, se entregaron despensas, apoyos directos y, lo que más sorprendió, ¡ocho secretarios de gabinete estuvieron presentes! Pocas veces se ve una movilización tan coordinada para atender a un solo municipio.
Lo que distingue a Jaumave no es solo la cantidad de apoyos, sino la velocidad con que las peticiones se atienden. En menos de 15 días, solicitudes hechas en campo ya tenían respuesta, y previamente, mediante la Secretaría del Bienestar, se habían entregado materiales para construcción y tinacos para el abasto de agua. Ninguno de los otros cuatro municipios del altiplano puede presumir un nivel de atención similar. Esto no es casualidad: es reflejo directo de una buena gestión municipal, de saber tocar las puertas correctas, pero también de un profundo afecto del gobernador y su esposa por esta tierra janambre.
El trabajo en equipo entre los niveles estatal y municipal brilla aquí como ejemplo, mostrando una administración que piensa en los que menos tienen. Y lo mejor: apenas van ocho meses de gobierno de Manuel Báez Martínez, lo que augura un desempeño aún más sólido para lo que resta del trienio.
Si Jaumave sigue por este camino, no solo mantendrá su título de “consentido del altiplano”, sino que se convertirá en referencia regional de cómo una buena relación política y compromiso social pueden transformar realidades.