LAS TRES
Entre la falta de agua y los topos se ve diezmada la producción de los sembradores de vida en Calabacillas.
Dicen expertos que, así como en el ejido Aguacate se agotaron los veneros, podría ocurrir en otras comunidades limítrofes a dicho ejido y es que en Tula de manera indiscriminada están chupando el agua del subsuelo para regar sus plantaciones y ello, repercutirá en que llegue un volumen inferior del recurso que se requiere para regar las 2 y media hectáreas que incorporaron al plan de la Secretaria del Bienestar a más de 40 Sembradores.
Sinceramente, no ha sido buen proyecto el programa de Sembrando Vida, por dos motivos, el primero que están consumiendo un gran volumen de agua en regar los frutales y en segundo término que no hay producción para que sea rentable.
Y podría ser redituable si se cambia el concepto de las plantaciones, es decir, introducir hortalizas que, si dejaría valor agregado al productor, toda vez que, se abriría un mercado que otorgue dividendos a los sembradores.
Porque en el bajo nivel friático, en los pozos, los apoyos sesgados a los técnicos, y los topos, al parecer va en picada el programa que si, en mínima parte es rentable para los asignados es decir, algo de dinero les queda del apoyo que reciben de la federación.
En otro comentario. – la semana próxima pasada se benefició a los habitantes de Calabacillas con rotoplas los cuales hizo llegar la alcaldesa Brisa Verber Rodríguez, es que esa es la única manera de que las familias almacenen agua porque los incandescentes rayos del sol están haciendo estragos y las personas deben de hidratarse para que no los afecte un golpe de calor.
Y cambiando de briagas. – ya se siente la efervescencia política en Bustamante, pero no de parte de Morena, partido que no tiene líderes, ni estatales, ni locales, por lo que los pronósticos de que conquisten el municipio Bustamantenses se antoja muy remoto.
El único que le está metiendo enjundia a la cosa política en el altiplano es el hijo del gobernador, pero no se aprecia que le sepa a estos menesteres, y es que si se hubiese asesorado de los viejos zorros de mar, no habría errado tanto en la repartición de puestos del estado.
Sin duda, siempre en antaño a las personas que se les asignaban los cargos del estado, eran los individuos que conocen a la gente y son los que estaban más cerca del corazón de los electores, pero en esta ocasión se PALOmio a puro neófito, personas que en el pueblo donde tiene su radio de disponibilidad, no comulgan con la comunidad y por lo tanto no tiene como entregar cuentas alegres en el año 2024, y aunque se enoje el Junior, necesita ser más humilde, hacerse asesorar por gente que conoce al dedillo la política, en este caso, del altiplano tamaulipeco…. Y es que nunca es bueno pelear para perder.