LAS TRES
Las imposiciones siempre han resultado dañinas para los proyectos políticos, esto viene a colación porque en el cubículo donde se toman las decisiones en Morena, les ha fallado rotundamente el ojo clínico.
En diversas comunidades, en especial en el municipio de Bustamante Tam; donde se empecinaron los jerarcas en PALOmiar a Román Reyes Pérez (a) el Bronco, para que compita por la alcaldía de dicho conglomerado humano, perooooooooo.
Sinceramente el personaje en mención ha demostrado que no es un corcel indómito, tosco, desafiante, rudo, sino un trotón, sin bríos, cualquier mal jinete se sostiene en su grupa, y ello, lo demerita, ya que con tan solo propiciar ese mote, debería causar respeto y por consiguiente, el pueblo lo erigiría como el paladín de las causas más sentidas de la comunidad, pero más bien ha demostrado ser un insignificante rocín, pegado al balancín de un guayín que solo se utiliza para acarrearle heno a los ganados.
No encontré eufemismos para quitar lo áspero de los comentarios, porque el propio candidato de MORENA, no ha dado pábulo para cambiar la percepción que se tiene de su Persona, de ser un liliputiense en asuntos políticos.
El arranque de campaña del Bronco representa la crónica anunciada de una derrota aplastante y, es que, mientras reúne el candidato de Morena a un grupúsculo de seguidores, los de la casa de enfrente marchaban en cantidades olímpicas demostrando por que son exitosos.
No ha mucho de hoy,- una mujer valiente, entrona, con lenguaje carretonero, hosca, un tanto palurda, daba la cara y se confrontaba con cualesquiera personas, para defender la política nacionalista que enarbola Andrés Manuel López Obrador, ¿peroooooo ahora, donde esta Josefina Tejada Zamarripa?, la cual hizo crecer la militancia Morenista, hasta casi los dinteles del triunfo, pero en esta ocasión no ha metido, ni las manos ni, esa lengua mordaz, para defender a su partido con furia y, es quizá porque no siente química con el Bronco, quien con malas prácticas le arrebató su liderazgo, que se sostenía con hechos no con zalamerías.
Pero hacer la barba, a los jefes para que te den una canonjía, está comprobado que no es palanca de éxito en las urnas y, en esta ocasión, sin duda, se le dará la razón a la “zapatona”, mujer que venció todos los obstáculos que le imponían sus enemigos, y con esa entereza, logro hacer crecer dicho partido, a ella, no le importaba no traer coche, con un caballo de acero, se conformaba para cruzaba montes y valles en toda la geografía Bustamantense, y siempre llegaba a tiempo para promover a MORENA si, lo hacía en una vieja motoneta de magneto, que la llevaba en su desvencijado asiento a buscar el posicionamiento del partido, mismo que ahora le arrebatan, tan solo para sepultar lo que hizo crecer en muchos años el presidente AMLO a nivel nacional y en Bustamante la Zapatona.
