Maíz Nativo de Tula, un Tesoro Genético por Proteger
Redacción
En México, existen 64 razas nativas de maíz, de las cuales 59 son originarias del país, según el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (Inifap). En el municipio de Tula, Tamaulipas, se han identificado al menos cinco variedades de maíz nativo, algunas de las cuales son únicas en la región.
El Inifap ha realizado un proyecto para conocer la diversidad y distribución actual del maíz en Tamaulipas, y ha encontrado que en la zona del altiplano se han conservado razas de maíz nativas en estado puro, sin mezclarse con otras variedades.
Es importante considerar al maíz criollo nativo del municipio de Tula y de la región como una raza única que se le proteja y se promueva el uso, cultivo y manejo adecuado. Este maíz es excelente en sabor y nutrición, tanto para el animal como para el humano, y representa un gran nicho de oportunidades por su alto valor nutritivo y alimentario.
La variabilidad genética entre razas de maíz dio origen a una gran diversidad de usos especiales, pero es necesario destinar más esfuerzo, tiempo e inversión para el rescate, conservación y aprovechamiento tecnológico del maíz nativo.
“El maíz nativo es el origen de todos los maíces mejorados, porque a través del tiempo guardan en su genética muchas características no explotadas como resistencia a plagas, enfermedades, sequías y heladas”, destacó un experto. La importancia de su conservación es precisamente para aprovechar tecnológicamente su uso y su potencial genético para un mejoramiento en el futuro.