Para justificar incompetencia, Imelda San Miguel acusa violencia de género
Por Merari Leos Villasana
Cd. Victoria/ Redacción.- “Que le quede claro que yo puedo someter a receso cuando se me dé mi gana” dijo altaneramente la diputada Imelda San Miguel mientras presidia la sesión del 20 de enero en el Congreso Local.
También de manera grosera ordenó: “Le cierran el micrófono a los secretarios” cuando el diputado Marco Gallegos estaba hablando, violando así su derecho a la libertad de expresión, y al ordenamiento del reglamento interno de ceder la palabra a quien lo solicite, para conferir la palabra a su compañero de bancada, el diputado panista Félix ‘Moyo’ García.
De igual forma, cuando los diputados Magaly Deándar, Eliphalet Gómez, Úrsula Salazar, Humberto Prieto reclamaron la palabra para argumentar en contra, San Miguel Sánchez, los ignoró y declaró abierto el sistema de votación ante los reclamos de los diputados morenistas y la rechifla del público que le gritaba que el Congreso era del pueblo y no de ella.
Citando el Artículo 19, de la Ley sobre la Organización y Funcionamiento Internos del Congreso del Estado Libre y Soberano de Tamaulipas, en su párrafo segundo que menciona: “Como garante del imperio de la ley en el desarrollo de las sesiones, la Mesa Directiva normará su actuación por los principios de imparcialidad y objetividad.” Fue el diputado Suarez Mata, presidente de la mesa directiva en el periodo pasado quien le demandó imparcialidad a San Miguel.