Programas sociales reducen pobreza en Tamaulipas, pero persisten retos

Maggie Tamez
El Delegado de los Programas para el Bienestar en Tamaulipas, Luis Lauro Reyes Rodríguez, aseguró que la política social del actual gobierno federal ha marcado “un nuevo rumbo con cercanía, honestidad y resultados”, destacando la entrega directa de apoyos a través del Banco del Bienestar, sin intermediarios.
De acuerdo con cifras del INEGI, la pobreza en el estado pasó de 26.8% en 2022 a 20.2% en 2024, mientras que 50 mil 200 personas dejaron atrás la pobreza extrema en el mismo periodo.
Estos resultados se atribuyen a la ampliación de los programas sociales, que alcanzan actualmente a más de 625 mil tamaulipecos, con una derrama económica anual superior a los 19 mil millones de pesos.
Entre las acciones más relevantes anunciadas en el Primer Informe de Gobierno, Sheinbaum destacó la conclusión del Hospital General del IMSS-Bienestar en Ciudad Madero y la construcción de un nuevo hospital del ISSSTE en el sur del estado, con capacidad regional para atender también a Veracruz y la Huasteca Potosina.
En paralelo, el programa “Salud Casa por Casa” ya opera en la entidad, con brigadas médicas que visitan directamente a adultos mayores y personas con discapacidad, además, Tamaulipas se posicionó entre los primeros lugares en la entrega de apoyos de “Vivienda para el Bienestar”, que busca garantizar hogares dignos a familias de bajos ingresos.
No obstante, la reducción de la pobreza no elimina preocupaciones sobre la sostenibilidad financiera de los programas y el impacto de la derrama en la economía local.
Expertos señalan que, aunque los indicadores muestran mejoras, la entidad enfrenta desafíos en materia de empleo formal, seguridad y desarrollo económico, aspectos que no pueden cubrirse únicamente con transferencias directas.